Lord Eldritch
2011-08-17 00:14:53 UTC
Los días de nuestra vida es, si no la serie de episodios mas larga, una de
las mas largas (11000 episodios ya) y, quizás, la más representativa de lo
que llamamos "culebron". Ha habido series mas largas, y más cortas; series
como Dallas, Dinastía, Falcon crest, melrose place,... con mayor o menor
longitud mantienen una estructura común. En todas, la trama gira alrededor
de una familia o persona a lo lo largo de los episodios opcionalmente, los
culebrones pueden ser temáticos (abogados , médicos,...), pero la propiedad
común es que se centran en las interacciones y, principalmente amoríos de
los
personajes; poco a poco se forma un universo en le que todos se relaciones
con todos, aparecen relaciones como setas: amantes, hijos secretos, padres o
hermanos que no se han visto nunca...
Este años he estado viendo la edición de Supervivientes, un "concurso" de
Telecinco que me ha hecho pensar mucho (bueno, sólo un poco). Un concurso en
el que se rompen las normas que podríamos considerar justas: las reglas no
son conocidas de antemano, los concursantes van y vienen y sobre todo, no se
encuentran en igualdad de condiciones. Me ha venido a la mente esos
concursos en los que se advertía que no podían participar empleados o
familiares de la compañía; ahora, es la misma compañía la que pone en el
concurso a una empleada, una empleada que acaba ganando el concurso.
No sólo he visto (parte de) los programas del concurso si no también (parte)
de los otros programas de la cadena en los que se hace un amplio seguimiento
del concurso. Y, gracias a ello, me he dado cuenta de la realidad. No de la
realidad que supuestamente nos quiere indicar telecinco si no de la
monumental obra que han construido, poco a poco, y que creo que la gente
todavía no es capaz de comprender.
Telecinco ha construido un mundo alternativo, un reparto de personajes
a partir de los cuales ha elaborado poco a poco una serie, un culebrón del
que hay entregas diarias y de diversos tamaños: hay avances y resúmenes
por la mañana y hay un episodio principal todos los días (Sálvame). Al lo
largo de los "episodios", innovadoramente, la historia se cuenta en manera
de entrevistas a los mismos y, a través de estas entrevistas, la historia
evoluciona mientras hablan de sus vidas familiares, laborales e íntimas.
Hábilmente, los entrevistados son capaces de desarrollar la historia como si
fuese realidad, pero, curiosamente, cumplen las pautas de los guiones de los
culebrones:
- Los episodios se centran el as relaciones personales, especialmente las
que se derivan de contactos íntimos entre los personajes
- Se desvelan supuestos secretos, como hijos, relaciones actuales,
relaciones de hace años, tendencias sexuales,...; se discuten, se descubren
y se niegan...
- Cuando el personaje tema se desgasta, desparecen, generalmente por un
tiempo, hasta que aparece con una trama nueva. La aportación de nuevos
personajes a la ficción se consigue a base de los "realities" de la cadena (
o incluso de otras). Incluso los participantes de los programas como
entrevistadores/colaboradores pueden formar parte de la serie;
principalmente, porque ya lo hacen desde el principio; no hay diferencia en
el sitio en el que se sientan: entrevistador y entrevistado son dos papeles
de la misma escena, con la misma relación que existe con los
entrevistadores, que podrían ser capaces de hacer el programa ellos mismos;
es un simple cambio de guión.
- Existen personajes recurrentes, que aparecen de vez en cuando, y que,
curiosamente, son capaces de mantener un personajes en las tramas más
dispares.
- En las series anteriormente mencionadas, un personaje realmente importante
es.. "el malo" ¿Qué sería de Dallas sin J.R.?¿O Falcon Crest sin Angela
Channing? Telecinco tiene ahora una señorita llamada Aída en el papel de
mala malísima capaz de encajar las críticas de todo el resto de una cadena y
recibir continuamente, con la mayor estoicidad, un insulto que se está
poniendo de moda en la cadena; una señorita que, en el caso de que se crea
lo que hace y dice, debería estar en una sesión continua de psiquiatría
hasta que su megalomanía se reduzca a límites normales y no en una
plataforma para ser observada..
Desde este punto de vista he comprendido que Telecinco no está ofreciendo
realidad, si no una ficción, un universo paralelo, en múltiples entregas
diarias en el que la tercera dimensión no se aplica como un efecto visual,
si no que la tercera barrera se sobrepasa incrustando la historia en la vida
real.
Ya he perdido la virginidad/inocencia (a lo mejor la he perdido demasiado
tarde); cada vez que veo un (trozo de) programa de los que caracterizan esa
cadena, ya no puede ver más de un episodio de la serie, una nueva entrega de
una ficción.
PS: No se si postearlo también en series..:D
las mas largas (11000 episodios ya) y, quizás, la más representativa de lo
que llamamos "culebron". Ha habido series mas largas, y más cortas; series
como Dallas, Dinastía, Falcon crest, melrose place,... con mayor o menor
longitud mantienen una estructura común. En todas, la trama gira alrededor
de una familia o persona a lo lo largo de los episodios opcionalmente, los
culebrones pueden ser temáticos (abogados , médicos,...), pero la propiedad
común es que se centran en las interacciones y, principalmente amoríos de
los
personajes; poco a poco se forma un universo en le que todos se relaciones
con todos, aparecen relaciones como setas: amantes, hijos secretos, padres o
hermanos que no se han visto nunca...
Este años he estado viendo la edición de Supervivientes, un "concurso" de
Telecinco que me ha hecho pensar mucho (bueno, sólo un poco). Un concurso en
el que se rompen las normas que podríamos considerar justas: las reglas no
son conocidas de antemano, los concursantes van y vienen y sobre todo, no se
encuentran en igualdad de condiciones. Me ha venido a la mente esos
concursos en los que se advertía que no podían participar empleados o
familiares de la compañía; ahora, es la misma compañía la que pone en el
concurso a una empleada, una empleada que acaba ganando el concurso.
No sólo he visto (parte de) los programas del concurso si no también (parte)
de los otros programas de la cadena en los que se hace un amplio seguimiento
del concurso. Y, gracias a ello, me he dado cuenta de la realidad. No de la
realidad que supuestamente nos quiere indicar telecinco si no de la
monumental obra que han construido, poco a poco, y que creo que la gente
todavía no es capaz de comprender.
Telecinco ha construido un mundo alternativo, un reparto de personajes
a partir de los cuales ha elaborado poco a poco una serie, un culebrón del
que hay entregas diarias y de diversos tamaños: hay avances y resúmenes
por la mañana y hay un episodio principal todos los días (Sálvame). Al lo
largo de los "episodios", innovadoramente, la historia se cuenta en manera
de entrevistas a los mismos y, a través de estas entrevistas, la historia
evoluciona mientras hablan de sus vidas familiares, laborales e íntimas.
Hábilmente, los entrevistados son capaces de desarrollar la historia como si
fuese realidad, pero, curiosamente, cumplen las pautas de los guiones de los
culebrones:
- Los episodios se centran el as relaciones personales, especialmente las
que se derivan de contactos íntimos entre los personajes
- Se desvelan supuestos secretos, como hijos, relaciones actuales,
relaciones de hace años, tendencias sexuales,...; se discuten, se descubren
y se niegan...
- Cuando el personaje tema se desgasta, desparecen, generalmente por un
tiempo, hasta que aparece con una trama nueva. La aportación de nuevos
personajes a la ficción se consigue a base de los "realities" de la cadena (
o incluso de otras). Incluso los participantes de los programas como
entrevistadores/colaboradores pueden formar parte de la serie;
principalmente, porque ya lo hacen desde el principio; no hay diferencia en
el sitio en el que se sientan: entrevistador y entrevistado son dos papeles
de la misma escena, con la misma relación que existe con los
entrevistadores, que podrían ser capaces de hacer el programa ellos mismos;
es un simple cambio de guión.
- Existen personajes recurrentes, que aparecen de vez en cuando, y que,
curiosamente, son capaces de mantener un personajes en las tramas más
dispares.
- En las series anteriormente mencionadas, un personaje realmente importante
es.. "el malo" ¿Qué sería de Dallas sin J.R.?¿O Falcon Crest sin Angela
Channing? Telecinco tiene ahora una señorita llamada Aída en el papel de
mala malísima capaz de encajar las críticas de todo el resto de una cadena y
recibir continuamente, con la mayor estoicidad, un insulto que se está
poniendo de moda en la cadena; una señorita que, en el caso de que se crea
lo que hace y dice, debería estar en una sesión continua de psiquiatría
hasta que su megalomanía se reduzca a límites normales y no en una
plataforma para ser observada..
Desde este punto de vista he comprendido que Telecinco no está ofreciendo
realidad, si no una ficción, un universo paralelo, en múltiples entregas
diarias en el que la tercera dimensión no se aplica como un efecto visual,
si no que la tercera barrera se sobrepasa incrustando la historia en la vida
real.
Ya he perdido la virginidad/inocencia (a lo mejor la he perdido demasiado
tarde); cada vez que veo un (trozo de) programa de los que caracterizan esa
cadena, ya no puede ver más de un episodio de la serie, una nueva entrega de
una ficción.
PS: No se si postearlo también en series..:D
--
Lord Eldritch
Lord Eldritch